El clima extremo es uno de los mayores desafíos para quienes trabajan al aire libre o en entornos industriales exigentes. Altas temperaturas en verano, frío extremo en invierno o cambios bruscos durante la jornada pueden afectar tanto al rendimiento como a la salud. En este contexto, la ropa técnica se convierte en una aliada indispensable dentro de la ropa laboral.
Ropa técnica: clave para soportar el calor en el trabajo
Cuando el calor aprieta, el cuerpo necesita transpirar y mantenerse fresco. La ropa de trabajo para verano debe facilitar la ventilación, expulsar la humedad y proteger del sol. Además de llevar menos ropa, debes elegir las prendas correctas.
¿Qué buscar en la ropa técnica para altas temperaturas?
- Tejidos transpirables y ligeros como el poliéster técnico, el algodón orgánico o mezclas técnicas que expulsan el sudor y favorecen la evaporación.
- Colores claros que reflejan la radiación solar y mantienen el cuerpo más fresco.
- Corte ergonómico y zonas de ventilación (rejillas, paneles perforados) que aumentan el confort térmico.
- Protección UV integrada, fundamental en trabajos prolongados bajo el sol.
Algunos sectores como la construcción, la agricultura o el mantenimiento urbano requieren equipación específica que combine frescura con resistencia a la abrasión o a los roces.
Protección frente al frío: ropa técnica para bajas temperaturas
En el otro extremo, el frío puede provocar rigidez, entumecimiento e incluso lesiones si no se usa la ropa laboral adecuada. El objetivo aquí es conservar el calor corporal sin perder movilidad, algo que solo se consigue con el diseño y los materiales correctos.
Características de la ropa técnica para frío extremo:
- Aislamiento térmico multicapa, con tecnologías que atrapan el calor sin añadir volumen innecesario.
- Tejidos impermeables y cortavientos, como el softshell o el poliéster laminado.
- Interior forrado en materiales térmicos, como el microfleece o el forro polar.
- Costuras termoselladas y cierres ajustables que impiden la entrada de aire frío.
En entornos industriales o en trabajos expuestos al exterior (logística, transporte, almacenes sin climatizar), la ropa técnica invernal es un EPI esencial que garantiza tanto la protección como el confort.
Capas inteligentes: cómo vestirse para condiciones cambiantes
Una de las mejores estrategias para climas extremos es el sistema de capas técnicas:
- Primera capa (ropa interior térmica o transpirable): regula la humedad corporal.
- Segunda capa (polar, softshell): retiene el calor.
- Tercera capa (cazadora o chaqueta impermeable): protege del viento, la lluvia o el frío extremo.
Este sistema modular permite al trabajador adaptarse a cambios de temperatura sin perder protección, lo que resulta clave en tareas dinámicas o de larga duración.
Normativas que debe cumplir la ropa laboral para clima extremo
Para ser considerada ropa de trabajo técnica, las prendas deben cumplir ciertas normas europeas:
- EN 14058: protección contra ambientes fríos.
- EN 343: protección contra lluvia y humedad.
- EN ISO 20471: visibilidad en condiciones adversas (útil en invierno).
- EN 13758-2: protección contra rayos UV.
Asegurarse de que la ropa laboral elegida cumple con estas normativas es fundamental para garantizar una protección real y certificada.
Protección térmica sin renunciar al rendimiento
Trabajar con calor o frío extremo no debería ser sinónimo de incomodidad ni de riesgo. La ropa técnica actual está diseñada para ofrecer lo mejor de ambos mundos: protección climática y movilidad funcional. Escoger bien tu ropa de trabajo según el entorno te permite mantener el rendimiento, evitar enfermedades y cumplir con la normativa.
En TUCLABORAL contamos con una amplia gama de equipación profesional adaptada a cualquier clima. Porque tu seguridad y tu confort no pueden depender del tiempo que haga.